Cuidado de la ropa: cómo hacer que dure más tiempo

Seguramente tienes en el armario ropa que te gusta, pero que tiene alguna bolita, mancha, arruga o desperfecto que se nota mucho y prefieres no mostrar. Normalmente podemos arreglar esto usando productos para quitar las manchas o una máquina quitapelusas, pero al final, todo esto quita tiempo (o es necesario un doble lavado). En este caso, es mejor cuidar la ropa lo mejor posible para evitar que ocurran estos desperfectos. Si quieres saber más sobre el cuidado de la ropa, te lo explicamos a continuación. ¡Toma nota y que tus prendas duren mucho tiempo!

Aprende a utilizar correctamente tu lavadora

Puede parecer fácil, pero poner (bien) una lavadora tiene su truco. El objetivo de asegurar dicha labor es sencillo: garantiza la conservación de tu ropa y te ayuda a ahorrar agua, energía y los propios productos de limpieza que usas. Ten en cuenta los siguientes pasos, recomendados por Vogue, para lavar la ropa y optimizar al máximo cada uno de tus lavados. 

Separa por colores

¡Este punto es importante! Si quieres mantener tus prendas como el primer día, debes separar por colores si vas a lavar en la lavadora para evitar que se estropeen absorbiendo los colores de otras. ¡Es muy fácil! Solo tienes que clasificar tu ropa para lavar:

  • Colores oscuros: negros, azules, grises, verde oscuro…
  • Colores claros: beige, rosa, crudos, colores pastel…

Si has añadido una prenda nueva recientemente a tu armario recuerda que, si no está prelavada con anterioridad, es aconsejable lavarla a un máximo de 30º para evitar que se destiña.

Cómo lavar ropa blanca 

En el caso de la ropa blanca, hay que prestar especial atención. Se recomienda no mezclar la ropa blanca con ningún otro color, ni siquiera con ropa clara, para garantizar que se mantiene el color blanco puro de los primeros usos.

Si quieres lavar ropa blanca en lavadora, es conveniente elegir programas de lavado de 40º e incluir algún producto que potencie el blanco (como percarbonato de sodio para ropa). Para que tu ropa se mantenga blanca puedes utilizar productos específicos para esta finalidad o recurrir a otras técnicas más caseras, como el uso de vinagre o el secado al sol. 

En caso de decidir usar vinagre para blanquear la ropa, usa una proporción de 3 tazas de agua por media de vinagre blanco o vinagre de limpieza y pon tu prenda a remojo durante media hora.

Clasifica por tejidos

Siempre que sea posible, intenta separar la ropa por el tipo de tejido. Lo más recomendable es echarle un vistazo a la etiqueta de tus prendas y separar la ropa en función de su material de fabricación para asegurar que cada tejido se cuida lavado tras lavado como es debido. ¡Tranquilo! No es necesario ser excesivamente minucioso. Con hacer una clasificación básica como esta, es suficiente:

  • Ropa de algodón.
  • Tejidos sintéticos.
  • Prendas delicadas.

Ropa delicada

Como bien dice su nombre, estas prendas son especialmente frágiles y hay que proporcionarles el cuidado que merecen. Para garantizar que las prendas delicadas sufren el mínimo daño posible y se mantienen como nuevas durante más tiempo, puedes tomar en cuenta estos consejos:

  1. Vacía los bolsillos antes de meter las prendas en la lavadora.
  2. Lávalas del revés para minimizar el daño a las fibras.
  3. No llenes por completo la lavadora. Déjala a un tercio de su capacidad.
  4. Selecciona el programa delicado en la lavadora y evita centrifugados intensos.
  5. Consulta la etiqueta de cuidado para saber cómo secarlas.
  6. En caso de secarla al aire, cuélgalas en una percha, pero solo si su peso en mojado no las deforma. Por el contrario, sécalas con una toalla previamente.
  7. Plánchalas solo cuando sea necesario y cuida la temperatura de la plancha. Los tejidos delicados son sensibles al calor, así que intenta planchar siempre con un paño blanco o con una prenda del revés de por medio. 
  8. Espera a que las prendas se enfríen antes de guardarlas en el armario.

Detergentes y suavizantes

Otro punto importante a tener en cuenta a la hora de cuidar tu ropa tras cada lavado es el uso óptimo de detergentes y suavizantes. 

Asegúrate de que utilizas la cantidad de detergente y suavizante adecuado en cada carga. Para evitar no usar de más, échale un ojo a la etiqueta de la botella de producto, que te indicará exactamente la cantidad de producto que debes emplear. Así, evitas acumular residuos en la ropa y en la propia lavadora. ¡Pero cuidado! Si utilizas de menos, te arriesgas a que la ropa siga sucia al salir de la lavadora.

En el caso del suavizante, si no estás seguro de si debes utilizarlo o no, lo mejor es ser precavido y no usarlo. Si abusas de este producto, las fibras de la ropa se pueden debilitar, llevando a que la prenda pierda su forma y textura. Como es el caso de la ropa deportiva, donde es mejor evitar el suavizante y utilizar un poquito de vinagra de limpieza para neutralizar olores. El vinagre se vierte en el compartimiento del suavizante.

¡Tampoco abuses de la lejía! Aunque puede ayudarte a mantener la ropa blanca y brillante, su uso en exceso puede desgastar las fibras de la prenda, estropeando prematuramente tu ropa debido a los componentes químicos que conforman este blanqueador.

Cómo cuidar tu lavadora

El cuidado y la atención no solo deben ir dirigidos a tus prendas, si no también a la propia lavadora. Marca una rutina de mantenimiento periódico, y revisa su estado con más detalle al menos una vez al año. De esta forma, te ahorrarás dinero en averías y gastos innecesarios en consumo energético. Sigue estos sencillos consejos recopilados por la OCU para prolongar la vida de tu electrodoméstico:

  1. Comprueba que tu lavadora está bien instalada. Si tiembla mucho durante el proceso de centrifugado, es posible que tu lavadora no esté bien nivelada y, por tanto, tenga más posibilidades de estropearse. 
  2. Lava en agua fría o templada. Si mantienes tus lavados en una temperatura inferior a 40º, contribuirás a alargar la vida útil de la lavadora, además de ahorrar energía. Para ello, puedes seleccionar, por ejemplo, el programa Eco.
  3. Haz una limpieza total de tu lavadora. Recuerda limpiar el filtro de la lavadora y el tambor. Para este último, puedes ayudarte de programas incluidos en tu electrodoméstico o, en el caso de no tenerlos disponibles, realizar un lavado a 90º con la lavadora vacía para limpiar a conciencia su interior.

Cómo lavar ropa a mano

Bien es sabido que es mejor mantener los tejidos delicados como la seda o el encaje lejos de la lavadora para evitar que pierdan su brillo original o se estropeen. Así, entra en juego el lavado a mano, una alternativa idónea para este tipo de telas. 

Para lavar a mano correctamente, lo mejor es revisar primero la etiqueta de la prenda y seguir sus recomendaciones de lavado y secado. También es importante escoger el detergente adecuado, asegurándonos de que es apto para el cuidado y mantenimiento de tejidos delicados (y que no sea dañino para las manos).

Una vez seleccionado el producto, se debe verter un poco en agua tibia y dejar reposar a remojo la prenda durante cinco minutos, antes de frotar delicadamente con un cepillo especial (si el tejido lo permite, sino simplemente frotamos con las manos). Finalmente, se escurre sin retorcer y se pone a secar.

Cómo tender la ropa

El secado es el final del camino en la labor de limpieza y desinfección de nuestra ropa. Por ello, cerrar este proceso siguiendo unas recomendaciones que garanticen que tus prendas regresen a tu armario en el mejor estado posible es esencial. Tender bien la ropa asegurará que tu colada seque antes, que no se deformen ni arruguen tus prendas y que el planchado sea más sencillo (en caso de que lo necesite).

  1. Sacude las prendas antes de tender. Ayuda a deshacerte de arrugas o pelusillas indeseadas.
  2. Cuelga la ropa del revés. De esta manera, los colores se mantendrán vivos durante más tiempo.
  3. Deja espacio suficiente entre tus prendas. Cuanto más sitio tenga cada prenda, antes secará.
  4. Evita las pinzas. Si las necesitas, utiliza las pinzas de plástico sobre las de madera, ya que dejan menos marcas en la ropa.
  5. Ten cuidado con las prendas delicadas. Intenta que prendas como camisas o blusas se sequen colgadas en perchas.
  6. La ropa de lana es mejor secarla en horizontal, puede ser encima del tendedero. Ya que el peso por el agua, además de la gravedad, harán que se estire el tejido. 
  7. Para que no se estiren, los pantalones se deben tender de revés y con pinzas por los laterales, no en el medio de la prenda.

¿Por qué debemos cuidar nuestra ropa?

La producción de ropa representa el 10% de las emisiones de CO2 a nivel global, según datos de Greenpeace. Lo que convierte al fast fashion en una de las principales causantes de las nocivas condiciones que sufre a día de hoy nuestro planeta. Para evitar ser partícipe de esta problemática, es importante reducir nuestro consumo acelerado. 

Una de las formas en las que podemos contribuir a reducir esta contaminación es cuidando la ropa que ya tenemos en nuestro armario, de forma que se desgaste lo menos posible y gane durabilidad. Esto nos permitirá utilizarla en numerosas ocasiones antes de donarla o hacer upcycling. Así, además de contribuir al cuidado del medioambiente, lograrás disminuir gastos económicos constantes y evitables.

Con todas estas sugerencias y consejos, estás más que preparado para darle una larga vida a tu ropa y tu lavadora. Reducir gastos y combatir las consecuencias ambientales de nuestras acciones diarias es posible gracias al consumo responsable y al cuidado y mantenimiento de nuestras pertenencias más contribuyentes a esta crisis. ¡Sé consciente y empieza a reducir tu huella de carbono!

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